La Aurora fue adquirida en Francia en 1914, por encargo de la Municipalidad. Su autor es Emile Peynot (1850-1932).
Se la emplazó en 1918 en la Plaza Rodríguez Peña, en la esquina de Callao y Paraguay.
En 1928 se la traslada al Parque Rivadavia, recientemente inaugurado, que estaba, hasta ese momento, carente de monumentos. Más tarde se destinaría ese lugar para colocar el monumento a Simón Bolívar. Es por ese motivo que La Aurora fue llevada a un depósito, en el que permaneció hasta 1943.
El 23 de noviembre de 1943 sería llevada al Parque Chacabuco, lugar donde estuvo hasta que comenzaron las obras de la Autopista 25 de Mayo, que dejó a este parque dividido en dos. Finalmente fue llevada al Parque Centenario el 6 de septiembre de 1978, lugar donde podemos verla actualmente.
Está realizada en mármol de Carrara en tres partes de gran tamaño, pesando la obra completa más de 25 toneladas.
Tiene forma espiralada en la que se observan figuras femeninas, y lienzos flameando con movimiento ascendente, culminando en la parte superior con un cuerpo desnudo, representando una mujer despertando al día, con los brazos hacia arriba, lo que le otorga movimiento y dinamismo. Una de las figuras está representada en pleno sueño, totalmente relajada. Otro de los cuerpos indica un estado de transición. Finalmente en la parte posterior se observa una escena campesina, donde un hombre realiza sus tareas colocando el yugo a dos bueyes. Todo parece hacer referencia a la aurora, al amanecer, al inicio de una jornada laboral campestre.
Su autor, Peynot, realizó también el Monumento de Francia a la Argentina ubicado en Plaza Francia.
Se trata sin duda de la obra que más plazas ha transitado en la Ciudad de Buenos Aires, ya que recorrió cuatro espacios desde 1918 hasta hoy.
En diferentes oportunidades La Aurora fue vandalizada y ensuciada con grafitis, teniendo que intervenir el Departamento de Monumentos y Obras de Arte (MOA) del Gobierno de la Ciudad.
Está colocada en uno de los extremos del lago del Parque Centenario, logrando un equilibrio con La Victoria Alada, escultura que se ubica en el otro extremo.
Fuente: CaballitoTeQuiero