El Club Ferrocarril Oeste, Playas Ferroviarias y la Agencia de Administración de Bienes del Estado (AABE) acordaron recuperar un terreno que la constructora de Caputo había intentado adueñarse mientras edificaba torres de lujo.
Los vecinos de Caballito tienen motivos para festejar ya que el barrio sumará un nuevo espacio de uso público: un playón ferroviario en los terrenos linderos al tradicional Club Ferrocarril Oeste, informa El Grito del Sur.
La idea surge del trabajo conjunto entre la empresa Playas Ferroviarias, la Agencia de Administración de Bienes del Estado (AABE) y el Club Ferrocarril Oeste. Ferro nació lindero a las vías del Ferrocarril Sarmiento, en el barrio de Caballito, y toda su identidad está estrechamente vinculada al mundo ferroviario. Incluso una de las canchas del “verdolaga” se encuentra en un terreno cedido por el Estado para el uso social del club.
El club, que cuenta con un importante tejido de trabajo deportivo, social, en Derechos Humanos e incluso en educación (cuenta con el Instituto Educativo Ferro Carril Oeste, una escuela primaria en el barrio), se suma ahora a la disputa por la calidad de vida y el espacio verde.
“Hay una parcela que estaba en disputa hace muchos años, sobre todo después de la construcción de las polémicas y conflictivas torres de Caputo, que se hicieron al lado de los terrenos del club. Cuando se hizo esta obra la empresa buscó adueñarse de una parcela que queda entre el club y las torres, justo enfrente de la escuela de Ferro”, explicó a El Grito del Sur Agustina Quinteros, comunera de Caballito por el Frente de Todos. “Buscaron adicionarlo como un jardín privado a las torres de lujo, algo que obviamente generó muchísima conflictividad”, señaló.
Fue entonces cuando el club y los vecinos se organizaron para defender el predio e impedir que se privatizara el espacio. Durante el proceso de edificación, la constructora puso candado al terreno y lo utilizó como depósito de materiales y estacionamiento de camiones, abonando al deterioro y abandono del lugar. Una vez finalizada la obra, el terreno quedó baldío y descuidado.
“Playas Ferroviarias le acercó una propuesta al club para poder cuidar el espacio de conjunto y desarrollar un proyecto en común, ya sea una playa parquizada u otro tipo de espacio público”, agregó Quinteros.
Mientras tanto, en Caballito y en los terrenos linderos a la vía continúa la puja para evitar que IRSA construya una serie de torres y un mega shopping sobre la avenida Avellaneda, frenado hasta el momento por decisión judicial debido a las irregularidades en la obra. Allí los vecinos siguen reclamando el emplazamiento de un parque en una de las comunas con menos espacio verde por habitante de la Ciudad.