Se trata de la firma Locura Deportiva. A fines de octubre el Gobierno de la Ciudad le había renovado la concesión de las canchas de fútbol que el ex jugador de Boca explota en el Polideportivo del barrio Saavedra, además se le había otorgado dos hectáreas más para la construcción de canchas de paddle. Según la IGJ es una sociedad “ficticia e ilícita.”
Un duro revés recibió de la Justicia el ex jugador de Boca, Sebastián Battaglia. A pocos días de haber logrado que el Gobierno de la Ciudad le renovara la concesión de las cancha de fútbol de 5, 8 y 11 jugadores en el Parque Sarmiento, y que le ampliaran el espacio a dos hectáreas más, la Inspección General de Justicia le hace el pedido de disolución de su empresa.
El escrito del organismo argumentó que la decisión fue tomada por tratarse de una “sociedad ficticia e ilícita”, debido a que incurría en incumplimientos como la falta de un domicilio legal y presentaciones de balances y estados contables.
Y agregó “la irregularidad e ineficacia, a los efectos administrativos de los estados contables, actas de asambleas y asistencia a asambleas” de la empresa y solicitó la notificación de la medida tanto a la Administración Federal de Ingresos Públicos como el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires. El escrito lleva la firma del inspector General de Justicia Ricardo Nissen.
La justicia comenzó a investigar a la firma cuando se hizo pública la Resolución N.º 66/SSABI/23, donde se aprobó la Licitación Pública de etapa única N° 10002-0697-LPU23 para el otorgamiento de la Concesión de uso y explotación de carácter oneroso de dos (2) espacios ubicados dentro del Parque Sarmiento. La concesión abarcaba 22.328 metros cuadrados, dividido en dos sectores del Parque. La empresa de Battaglia fue seleccionada por sobre otras compañias interesadas y con un canon mensual inicial de bajo costo: $11.050.000.
Con esta desición, el ex futbolista no solo retenía las concesiones de las canchas de fútbol, sino que -además- sumaba dos hectáreas para la construcción de dos canchas de paddle en un área ubicada entre el ingreso de Avenida Triunvirato y el de Balbín, donde actualmente existen canchas de tenis de cemento en abandonadas y con material oxidado. En ese lugar se construirían las nuevas canchas, además vestuarios y un sector de bar. Por su parte, la empresa se comprometía a poner en valor los caminos peatonales.
Ahora, el deportista y empresario debe justificar con pruebas documentales las irregularidades encontradas por la IGJ. Sino no lo logra la concesión otorgada se daría de baja al no contar con una empresa asignada.
Fuente: Inspección General de Justicia