En octubre pasado el consumidor pagó por los alimentos que llevó a sus hogares casi cinco veces el valor que recibió el productor agropecuario en su campo al comercializar la materia prima, precisó el último informe mensual de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME).
La brecha de precios para el promedio de los 24 principales productos agropecuarios que participan de la mesa familiar se ubicó en 4,49 veces en octubre, un 10,4% por debajo de septiembre. La caída, de acuerdo a los registros de Came, fue impulsado por fuertes mermas mensuales en las brechas del zapallito (-55,1%), la naranja (-54,9%), la mandarina (-54,5%) y la calabaza (-52%).
Este es el resultado que obtuvo el Índice de Precios en Origen y Destino (IPOD), elaborado por el sector de Economías Regionales de la CAME, y que tiene por objetivo medir distorsiones que suelen multiplicar por varias veces el precio de origen de la totalidad de los productos agropecuarios en su recorrido desde el campo hasta el consumidor.
Para obtener los precios de destino se relevaron más de 700 precios de cada producto, no sólo a través de un monitoreo diario de los precios online de los principales supermercados del país, sino también mediante un equipo de 30 encuestadores en mercados y verdulerías de Jujuy, Salta, Tucumán, Formosa, Chaco, Catamarca, Santiago del Estero, La Rioja, Santa Fe, Misiones, Córdoba, Mendoza, Ciudad Autónoma de Buenos Aires, Provincia de Buenos Aires, Chubut y Santa Cruz.
Allí pesa, tal como lo admiten desde la entidad mercantil y productiva, los costos adicionales que suelen recargar el precio que pagan los consumidores, como son cuestiones relacionadas a la estacionalidad, almacenamiento, cadenas de frío, y también el transporte y presentación de la mercadería.
Durante el mes pasado, la brecha mayor se detectó en la manzana roja, donde el precio se multiplicó por 12,6 veces desde que salió del campo, seguida por la zanahoria (11,3 veces), la pera (10,3 veces) y el pimiento rojo (6,4 veces). Además, los productos con menores brechas fueron la frutilla, que se mantuvo en 1,6 veces; la acelga, que bajó a 2,1 veces; el pollo (2,16 veces) y el repollo (2,82).
Por su parte, la participación promedio del productor en el precio final de los alimentos subió de 25,7% en septiembre a 28,3% en octubre. “La mejor situación la siguen teniendo los productores de frutilla, que recibieron el 62,6% de los precios de venta minorista. En cambio, en la manzana roja el productor apenas recibió el 7,9% del precio final”, señalaron desde CAME.
En el caso de la manzana roja, se registró un aumento de precios del 23,8% durante octubre. Según explicaron los especialistas de la Confederación hubo un impacto de los mayores costos de frío y de la logística. “Hubo una variación de 22,2% en los precios de destino frente a una disminución de 1,3% en los precios de origen. Además, interanualmente los precios de origen subieron 52,78%”, agregaron.
Por el lado de la frutilla, con la incidencia de los altos costos de producción por ser un producto altamente perecedero luego de su salida de la cadena de frío, “el comercio minorista opta por resignar ganancia para mover el producto, fijando un precio cercano al percibido por el productor. Una estrategia comercial que se registró durante todo el año”, comentaron desde Came.
Por último, el informe recordó que tanto la naranja como otros cítricos dulce registraron a lo largo del presente año u reacomodamiento de los precios, por el atraso de los precios de origen, provocando una rentabilidad negativa en los sectores de la producción.