El reclamo surge de varias instituciones porteñas y llegó a la legislatura. Las familias exigen la “desratización” de los establecimientos. “Nuestros hijos estudian entre excremento y ratas”, alertan.
Familias de las escuelas porteñas denuncian la presencia de ratas en los establecimientos a cargo del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires. Solicitan a las autoridades la urgente “desratización” de los diferentes escenarios con esta problemática y denuncian: “Nuestros hijos estudian entre excremento y ratas”.
“Las escuelas están todas mugrientas y llenas de ratas ¿esto es la educación para Larreta y Acuña?”, señaló a Tiempo Argentino, Agustín de La Cuesta, padre de una nena que cursa en la Escuela Nº 26 DE 6 República de Colombia.
Los hechos se registraron en diferentes instituciones, según denunció el mismo medio ocurrieron en los edificios de Fernández de Enciso al 4451, donde conviven varios establecimientos educativos: la Escuela Primaria Común N° 01 Dr. Delfín Gallo; el Jardín de Infantes Común N° 03 D.E 16 Mafalda; y una escuela de adultos.
Además, también advierten que la comunidad educativa de la escuela N° 2 D.E. 21, Eduardo Luis Vicente, ubicada en la calle Larrazábal 5430, del barrio de Lugano, hace meses que sus estudiantes conviven entre ratas, y muchos de los integrantes de la comunidad estudiantil dejaron de asistir a la escuela por dichas razones.
Posterior a las reiteradas denuncias, numerosas escuelas levantaron la voz para comentar que el problema se replica en varios edificios de la Ciudad. Una de ellas es la Escuela N° 16 D.E. 8 “Dr. José María Ramos Mejía” del barrio de Almagro, escenario en el que hace cinco meses sus estudiantes y docentes conviven entre ratas.
A partir de los casos repetidos, es que la comunidad educativa, alumnos, padres y docentes, cortaron la calle para visibilizar el hecho: “Le exigimos a Soledad Acuña (ministra de educación porteña) que limpie y desratice las escuelas, nuestros hijos no pueden estudiar entre ratas y mugre”, denunciaron las familias.
El conflicto llegó a la legislatura a través de un pedido de informe de la diputada por el Frente de Todos Claudia Neira. “Esto reviste una doble gravedad en tanto no sólo se pone en riesgo la salud y seguridad de los estudiantes y docentes, sino que también representa una afectación directa al derecho de acceso a la educación en un contexto que tan necesario resulta”, argumenta el escrito.
Y agrega: “Si bien la situación se produce a partir de la falta de medidas para paliar las plagas, es necesario llevar adelante acciones coordinadas en el exterior de las instituciones para una solución efectiva de la problemática. En ocasiones, las construcciones pueden ocasionar un incremento en la presencia de plagas, especialmente roedores, en zonas aledañas”.