La pobreza afecta al 40,9% de la población argentina, cifra equivalente a 18.500.000 personas, según los registros del INDEC al segundo semestre, lo cual significó un aumento del 5,5% contra igual período del año pasado y resultó la más elevada desde 2004, reflejando la gravedad de la crisis.
Según el informe con cifras relevadas hasta junio, el porcentaje de hogares por debajo de la línea de pobreza alcanzó el 30,4%, con un crecimiento del 5% contra igual período de 2019.
Dentro de ese segmento social, el 8,1% de los hogares se encuentra en indigencia, aquellos que ni pueden acceder a recursos para alimentarse, equivalente al 10,5% de la población, equivalente a 4.500.000 personas que padecen hambre.
Las cifras divulgadas por el INDEC reflejan el fuerte impacto de la pandemia y las medidas sanitarias adoptadas que afectaron seriamente el aparato productivo y generaron cierre de empresas y despidos.
El organismo indicó que para el universo de los 31 aglomerados urbanos, por debajo de la línea de pobreza se encuentran 2.849.755 hogares que incluyen a 11.680.575 personas y, dentro de ese conjunto, 754.155 hogares se encuentran en indigencia y 2.995.878 en esa situación.
Sin embargo, al efectuar una proyección nacional, teniendo en cuenta una población total de 47.000.000 de habitantes, alrededor de 18.500.000 personas son pobres y 4.500.000 indigentes.
Otro dato alarmante es el avance de la pobreza entre la población de menor edad: el 56,3% de las personas de hasta 14 años son pobres, una cifra que significó un aumento del 3,7% contra junio de 2019.
Sin embargo, el organismo advirtió el mayor crecimiento con relación al semestre anterior se observó en los grupos de personas de 15 a 29 años (49,6% del conjunto es pobre), con un aumento de 7,1 puntos y las de 30 a 64 (36,2%), con una suba de 5,7 puntos.
En comparación con fines de 2019, los indicadores de pobreza mostraron un aumento del 5,4% y del 2,5% en indigencia para el conjunto de la población.
Fuente: LA PRENSA