Luego del conflicto y los despidos en Intercargo, las FF.SS. podrán realizar tareas aeroportuarias y de rampa

La medida fue oficializada hoy con la publicación en el Boletín Oficial y se dá luego de que el Gobierno Nacional despidiera a 15 personas que desempeñaban funciones en INTERCARGO, y ordenó la desregulación del servicio de rampas en aeropuertos.

El Gobierno nacional formalizó el anuncio hecho por la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, sobre la habilitación de las fuerzas de seguridad para prestar servicios de rampa en los aeropuertos en caso de paros o medidas de fuerza por parte de los trabajadores de Intercargo.

La Resolución 49/2024, publicada hoy en el Boletín Oficial, permite el otorgamiento de autorizaciones aerocomerciales para servicios aeroportuarios de rampa, permitiendo a las fuerzas de seguridad, así como a operadores privados que cumplan con los requisitos legales, técnicos y económicos, hacerse cargo de estas tareas, según informó el Ministerio de Transporte.

Esta medida, promovida en conjunto por la Secretaría de Transporte del Ministerio de Economía, el Ministerio de Seguridad y el Ministerio de Desregulación y Transformación del Estado, responde a los recientes conflictos en el Aeroparque Internacional Jorge Newbery y busca asegurar la continuidad y estabilidad de los servicios aeroportuarios. Según el comunicado, esto permitirá que las fuerzas de seguridad actúen de forma inmediata en situaciones de “paros encubiertos o medidas de fuerza extorsivas”, evitando que los pasajeros sean afectados por el conflicto gremial.

En lo que va del año, Intercargo ha realizado 16 asambleas y cuatro paros, provocando demoras y perjuicios para los pasajeros, que en ocasiones han quedado varados en los aviones o esperando por su equipaje. Con esta desregulación, las autoridades aseguran que “los pasajeros ya no serán rehenes de conflictos gremiales”.

La normativa también permite a operadores privados competir en el mercado de servicios de rampa y atención en tierra, lo que obliga a Intercargo a operar en condiciones de igualdad con otras empresas. “Esto abrirá el mercado argentino a nuevos actores, en beneficio de los usuarios y pasajeros”, añade el comunicado.

Además, el proceso de autorización se agilizará mediante el principio de Silencio Positivo, permitiendo que, tras un plazo establecido y el cumplimiento de las condiciones operativas y de seguridad, las autorizaciones sean automáticas y válidas por 15 años, con opción de renovación.

“El Gobierno Nacional continúa en su política de desregulación del transporte aéreo, adaptando los servicios aeroportuarios a las necesidades del transporte aerocomercial actual para la comodidad de todos los argentinos”, concluye el comunicado.

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