Las autoridades porteñas estiman que hubo una recaudación superior a los U$S265.000.000 (cobrado en pesos, al tipo de cambio oficial) por todas las operaciones en el predio de Udaondo.
El Banco Ciudad remató las últimas parcelas del Parque de la Innovación del vecino barrio de Núñez y así el Gobierno porteño logró una recaudación total superior a los U$S420.958.960 tras vender un total de 28 parcelas desde 2019, según estimaciones oficiales.
Este martes la desarrolladora Grupo Chomer adquirió por U$S15.000.000 un terreno de 1.365 metros cuadrados. Tenía una base de U$S11.000.000 y fue disputado por el CEK y el Banco Industrial.
Además, el 2 de octubre se remató un terreno de 1.860 metros cuadrados, dividido en dos parcelas, en U$S24.550.000, adquirido por el Banco de Entre Ríos, ligado a la familia Eskenazi.
Las subastas del Parque de la Innovación cotizan en dólares pero los adquirientes pagan en pesos al tipo de cambio oficial, presuntamente a valores inferiores a los de mercado (ver más abajo).
En el Gobierno porteño tenían el objetivo de rematar todos los terrenos antes del recambio de autoridades que ocurrirá en diciembre de este año.
Esperan que en breve inicien los desarrollos inmobiliarios en los terrenos que ahora pertenecen al sector privado. En muchos casos se construirán edificios de hasta 10 pisos para oficinas y departamentos, muchos de ellos pensados para el alquiler temporal. La excepción son terrenos en Libertador y Udaondo, que tendrán hasta 100 metros de altura. Las adquirió el Grupo Werthein por U$S151.500.000, la subasta inmobiliaria más cara en la historia de CABA.
El Parque de la Innovación tiene 12 hectáreas y está delimitado por Av. Lugones, Av. Udaondo y las calles Bavio y Campos Salles. Se construyó en el predio que ocupaba el Tiro Federal, el cual fue mudado frente al Río de la Plata, en Costanera Norte.
En tanto, en mayo de este año el Gobierno porteño inauguró los espacios públicos, compuestos por plazas y caminos peatonales. Su construcción se costeó con parte de lo recaudado en las subastas.
Sobre el Parque de la Innovación, desde el Gobierno porteño señalan: “Es un nuevo espacio en la Ciudad de Buenos Aires que va a potenciar la economía del conocimiento de todo el país y su proyección global. Impulsará las actividades de emprendedores, estudiantes e investigadores, facilitando el encuentro entre ellos y generando sinergias con instituciones innovadoras públicas y privadas del país y el mundo con especial foco en educación, salud y tecnologías exponenciales”.
También resaltan que forma parte de la Red Internacional de Parques Tecnológicos (IASP) y la red de Parques y Polos Tecnológicos de la Argentina.
La iniciativa abarca la intervención de las 12 hectáreas, de las cuales “el 65% se destinará a espacios públicos, a la apertura de calles, la instalación de servicios y plazas, que disfrutarán todos los vecinos de la Ciudad”, según anunciaba el GCBA al inicio del proyecto.
En este tiempo hubo varias críticas a la propuesta del GCBA. Así, el abogado ambientalista Jonatan Baldiviezo, fundador del Observatorio del Derecho a la Ciudad, afirmó en varias oportunidades que las parcelas se remataron “a precios inferiores del mercado”. Aclaró a Nota al Pie que “el Estado las vende como si fueran parcelas sin infraestructura, sin espacio público” cuando en realidad “el gobierno porteño ya garantizó que se va a hacer cargo de la infraestructura de servicios públicos y la estructura del espacio público”.
También señaló que las parcelas se venden en pesos, “lo cual es un hecho insólito”: “Cuando uno quiere ir al mercado inmobiliario a comprar una vivienda no existe la opción de pagar la vivienda con pesos”. “El privado compra barato y luego va a capturar la plusvalía a futuro”, analizó.
En 2021, tras el desarrollo de la Audiencia Pública correspondiente, legislador porteño del Frente de Todos Matías Barroetaveña presentó un pedido de informes y resaltó: “El predio original, al igual que todo el sector delimitado por la Av. Del Libertador, Av. Gral. Paz, Av. Lugones y Av. Udaondo, era parte de un sector metropolitano destinado a actividades recreativas, en su mayor parte con suelo absorbente y profusa forestación; ralentizador de las inundaciones recurrentes en el área atravesada por los arroyos Medrano, White y Vega. De nada sirven los “techos verdes” en los edificios si se impermeabiliza más del 80% del suelo, y se proyectan estacionamiento subterráneos. Solo se agrega incertidumbre a sus actividades futuras y a la Comuna 13”.
Más cerca en el tiempo, cuando se supo de la intención de construir edificios con departamentos para alquileres temporarios, su compañero de bloque Manuel Socías dijo: “En el contexto de una gravísima crisis del mercado de alquileres, el GCBA vende tierra pública para promover la construcción de edificios enteramente dedicados a los alquileres temporarios en dólares”.