Lo pidió la Inspección General de Justicia (IGJ) por los “graves y reiterados” incumplimientos. La sociedad comercial Dakota S.A. cobrara 6.525 pesos por acarreo, pero pagaba tan sólo 55 mil pesos de canon.
La Inspección General de Justicia (IGJ) solicitó la nulidad de la sociedad comercial “Dakota S.A.”, ex concesionaria del servicio de grúas en la Ciudad por los “graves y reiterados” incumplimientos a las normativas vigentes. Se trata de la empresa que administró el servicio de acarreo de autos mal estacionados en Buenos Aires hasta fines de septiembre pasado.
El pedido de la IGJ se da luego de que el organismo se presente en el domicilio declarado por “Dakota” a principios de enero. Allí, los inspectores no encontraron señal alguna de la empresa, aunque días después se presentó una empleada del estudio “Pérez Alati, Grondona, Benites & Arntsen” con registros incompletos de las actividades de la firma.
La IGJ detectó una transferencia de competencias al accionista Marcelo Violante, quien desde hace 20 años es el “controlante exclusivo de Dakota S.A.”, percibiendo una remuneración “muy superior a la de los restantes directores”.
En la presentación de 78 páginas del organismo, se destacó que en 2014 la empresa cobraba 350 pesos para liberar el vehículo secuestrado mientras que a fines de 2022 se cobraba 6.525 pesos, en tanto que el canon que pagaba la empresa no se movió nunca de 55.000 pesos.
La IGJ invocó el artículo 19 de la Ley de Sociedad Comerciales, que establece que “cuando la sociedad de objeto lícito realizare actividades ilícitas, se procederá a su disolución y liquidación a pedido de parte o de oficio”, para solicitar la disolución de la firma a la justicia.